Si quieres que los espacios de tu casa o apartamento se vean más grandes, el color es la respuesta. Pero ojo, escogerlo apropiadamente es un factor muy importante para lograrlo.

Para empezar, debemos saber que círculo cromático se divide en dos: colores cálidos y colores fríos. Los colores cálidos se caracterizan por ser vibrantes y dan la sensación de “lleno”, estos colores harán ver tus espacios más cerca visualmente, por lo tanto, generan la ilusión de espacios pequeños y llenos, donde “no cabe nada más”. Los colores fríos en cambio, por su baja saturación, dan la sensación de calma y hacen ver los espacios más lejanos visualmente, por lo tanto, generan la ilusión de espacios grandes y con más espacio.

Ejemplos de colores fríos que puedes utilizar en tu hogar son: grises en diferentes intensidades, verde menta, verde aguamarina claro, los tonos lilas y rosas grisáceos, y los azules en diferentes tonalidades con mucho blanco para reducir la intensidad del color.

Puedes utilizar estos colores en parades específicas o pintar toda tu casa del mismo color, cuidando siempre que los techos sean blancos. Debes tener en cuenta, que los colores cambian de acuerdo al soporte en el que se encuentran aplicados, no es lo mismo ver un color en la computadora o el celular, que en un mostrario o en la pared. Es por esto, que puedes hacer pruebas de color, comprando pocas cantidades y pintando zonas pequeñas, hasta encontrar el color que más te guste.

Finalmente, juega con la decoración y la iluminación para generar contraste y calidez a tus espacios. Puedes combinar cojines, alfombras, cuadros e incluso puedes incluir muebles de madera de tono cálido para generar mayor impacto.

Esperamos que estos consejos sean de utilidad y si quieres ver cómo funcionan los colores que mencionamos, puedes visitar nuestros modelos en Cali, Jamundí y Palmira para extraer más ideas de decoración. ¡Te esperamos!